Una mujer y su hijo vivieron momentos para el olvido por culpa de una banda armada que los asaltó en su casa de Concepción, en Capital. Los sujetos, que eran tres y estaban encapuchados, los maniataron y les robaron unos $40.000 en efectivo, joyas varias y algunos aparatos, como una PlayStation y celulares, dijeron fuentes policiales.
La víctima, de apellido Regatuso (56), ayer se negó a dar una entrevista a este diario y además amenazó con que si salía una nota "van a ser boleta" y "se jactó de" que tiene contactos judiciales de alta jerarquía.
En la Fuerza dijeron que el hecho ocurrió pasada la medianoche del último martes, en una vivienda ubicada en inmediaciones de Avenida Rioja y Maipú, detrás de un local de venta de motos.
La hipótesis es que para acceder a la propiedad los sujetos se desprendieron por los techos hasta el patio, lugar donde sorprendieron a la mujer mientras regaba, señalaron los voceros.
A los empujones la hicieron entrar y luego redujeron también a su hijo, un joven de 21 años. A los dos los llevaron a una habitación y les ataron las manos con unas cuerdas, dijeron fuentes ligadas al caso. De esa manera se aseguraron el control de la casa y tuvieron total libertad para revisar todos los rincones buscando cosas de valor, como los $40.000, las joyas y algunos aparatos que decidieron llevarse luego de media hora en el interior de la vivienda.
Antes de escapar, los delincuentes dejaron encerradas a las víctimas y se llevaron las llaves de la casa, para de esa forma dificultarles la posibilidad de solicitar ayuda rápidamente.
Recién cuando se sintieron seguros madre e hijo decidieron desatarse y pidieron ayuda a los vecinos, quienes llamaron al 911.
Policías de la seccional 2da llegaron al lugar y recorrieron la zona buscando a los ladrones, pero no tuvieron suerte. Después se dio intervención a diferentes brigadas de investigación para que colaboren con el esclarecimiento del caso. Los investigadores entrevistaron a los vecinos y revisaron los registros de las cámaras de seguridad de la zona. Personal de Criminalística también trabajó en el lugar, recolectando huellas y otras pruebas para sumar a la pesquisa.
Hasta anoche no había ningún sospechoso identificado, aseguraron en la Fuerza.