Facundo recibió un empujón de su papá para poder subir una enorme piedra. Camila tomó fuerte la mano de su padre para atravesar un largo puente y Faustino, alentó sin parar a su abuelo para que corriera más rápido, junto a él. Así, sin importar qué obstáculo sortear y con el firme objetivo de divertirse los chicos corrieron la Aventura Infantil Corro con Papá. Fue ayer, en una de las bajadas del río San Juan, en Rivadavia.
A las 10 de la mañana el termómetro no llegó a los 5ºC, sin embargo esto tampoco fue un impedimento para que los niños se prepararan para la carrera aventura. Se pusieron camperas, gorritos de lana, guantes y arriba de todo el abrigo, las camisetas de la competencia. Los papás también se abrigaron mucho, pues el aire helado se hizo sentir intensamente.
Primero fue el turno de la entrada en calor. Luego, tras la largada, el primer obstáculo fue cruzar un puente por el medio del río. A pesar de que algunos dijeron tener un poco de miedo, todos se atrevieron a superar esta prueba. Luego llegó el momento de correr rápido. Los chicos y sus papás siguieron el sendero que estuvo señalizado y se fueron encontrando con algunas dificultades. Sin embargo, el trabajo en equipo hizo que nada les resultara imposible. Después de casi media hora de carrera y de que algunos se cansaran, llegaron a la meta, donde los esperaron las mamás con bombos, cornetas y hasta papelitos de colores.
Apostillas
Avalada
La Carrera Aventura Infantil es avalada por el Ministerio de Educación, porque se considera de carácter educativo. Según los organizadores la idea es educar a los chicos a que tengan buenos hábitos deportivos para su futuro.
Solidarios
Los chicos que participaron de esta carrera donaron un par de zapatillas en buenas condiciones para que sean entregados a chicos de escasos recursos. La entrega de estos calzados será durante la Aventura Infantil Solidaria, que se está organizando.
Para alimentarse
Además de educar en la importancia del deporte, la Aventura Infantil siempre enseña el valor de la hidratación y la alimentación en cada carrera. Esta vez, como los chicos corrieron con sus padres, fueron los adultos los que abastecieron a cada equipo.
Los equipos
500 chicos de distintas edades corrieron la Aventura Infantil. La mayoría de ellos estuvo acompañado por su papá, sin embargo hubo algunos que corrieron con su abuelo, papá, tío, padrino o algún otro adulto responsable.
Como profesionales
Para que los chicos sientan la importancia de la carrera, cada equipo fue tratado como profesional. Además de la charla que recibieron en la previa de la aventura, el sábado en la tarde hicieron la acreditación de cada uno de los dúos. En este acto, los niños recibieron las remeras, pañuelos y hasta las indicaciones con el recorrido.
Extensión
3.300 metros fue la extensión del recorrido de esta aventura infantil. En ese recorrido los chicos tuvieron que atravesar algunos obstáculos naturales, como piedras o pequeños cerros. Los papás fueron los que ayudaron en estos tramos.
De picnic
Mientras los chicos y los papás corrieron la aventura, las mamás quedaron del otro lado del río y disfrutaron un rato del aire libre. Con el mate y algunas medialunas para comer, disfrutaron de un breve picnic. Las mamás fueron además las encargadas de filmar y sacarle fotos a los equipos que fueron protagonistas de la carrera.