La primera jornada en Barreal incluyó una cena de camaradería en un lugar increíble, en los jardines de una posada, entre un bosque y un sector de aromáticas, con las montañas de fondo. Fue una reunión en la que los expedicionarios fueron agasajados en la tradicional posada de la familia Zunino. El clima acompañó para dar la bienvenida a los 160 expedicionarios.