En nuestra provincia cuando escuchamos hablar sobre producción y crecimiento tenemos la costumbre de pensar en nuestra dinámica minera o agrícola, pero últimamente nuevos vientos acompañan esos términos.
Gradualmente pero sin pausa, el Estado provincial está impulsando acciones que aspiran a fortalecer el ecosistema emprendedor y a las empresas de base tecnológica en particular.
La reciente iniciativa de acercar aportes no reembolsables a emprendedores de base tecnológica por parte del Ministerio de Producción vino acompañada de una sinergia más valiosa aún que el aporte económico que por razones presupuestarias queda acotada a un número limitado de beneficiarios. En esta oportunidad el programa se conformó con una pluralidad de encuentros y capacitaciones que dotó de herramientas a los postulantes, a la vez que esos encuentros permitieron fortalecer la red de networking que gradualmente se va conformando a nivel local entre emprendedores, incubadoras y espacios de gobierno.
"La aplicación de recursos en la denominada economía del conocimiento, lejos está de ser un gasto. Tal vez sea una de las más promisorias inversiones que tienden a diversificar la matriz productiva en nuestra provincia.”
Estamos pudiendo apreciar la presencia de incubadoras como entidades que acompañan y aceleran el crecimiento potencial de cada uno de los proyectos emprendedores mediante asesoramiento y capacitación. La participación de profesionales del medio ayudando a abordar cada iniciativa, atendiendo a pensar si ella posee viabilidad técnica y pensándola hacia mercados dinámicos y no limitados a lo local. Sumado a ello en la acción de pensar entre todas las partes en diferentes escalas sobre las posibilidades de cada plan de negocios, sumado al compromiso en el accionar y el seguimiento en pos de identificar oportunidades.
Todo en un espacio de encuentro entre referentes y pares que ayudan a abordar la dinámica de equipos y a considerar tanto a potenciales clientes como socios para el desarrollo de un proyecto de alto impacto, lo que genera una dinámica superadora y transformadora en la escena local.
La aplicación de recursos en la denominada, actualmente, economía del conocimiento, lejos está de ser un gasto. Tal vez sea una de las más promisorias inversiones que tienden a diversificar la matriz productiva en nuestra provincia.
En una época de innovación y de colaboración abierta, este tipo de acciones posiblemente den lugar a plataformas integrales para el nacimiento de empresas y la creación de empleos.
Probablemente estemos en presencia de una política que esperemos trascienda el concepto de política de gobierno para ser política de estado, con un perfil de crecimiento y de articulación que permita que tanto las agencias y secretarías involucradas coordinen acciones continuas y proactivas en fortalecer un ecosistema que afortunadamente en esta etapa se encuentra recibiendo un impulso profesional y planificado desde el Ministerio de Producción con la coordinación de la Secretaría de Política Económica en articulación con otras áreas de gobierno y referentes del sector privado.
Por Leonardo Siere
Docente. Análisis Económico del Derecho. UCC.
