Los seres humanos en el mundo entero hemos sido azotados por una pandemia donde nos ha puesto a prueba confrontandonos día a día con nuestros propios miedos, creando ansiedad, incertidumbre, inseguridad,etc. Está solo en nuestras manos tomarlo como una oportunidad dejando de buscar hacia adelante y afuera y darse cuenta de que lo que buscamos está ya en nosotros, explica Graciela Quiroga. Este detenerse forzoso por el que hemos atravesado nos deja la posibilidad de encontrarnos con él sí-mismo, un camino de retorno hacia nuestro interior. En estos tiempos de covid tenemos que ser pacientes, esperar y aceptar a que la naturaleza tomen su curso. El yoga nos puede ayudar en esta situación , yoga no es solo acción,( tapas) sino también es reflexión (svadhana) y rendición (Isvhara pranidhana). El mismo nos lleva a observar nuestras respuestas de las acciones en las asanas
(posturas) y ,no exigirse demasiado para no debilitar el sistema inmunitario . "El regalo que ofrece al cuerpo es inmenso pero el regalo que ofrece a la mente puede ser mucho más grandioso". B.K.S.Iyengar

El yoga es una ciencia
Un arte que potencia una perfecta salud física y desarrolla la mente para dar respuesta a todos los contratiempos de la vida diaria, desarrolla la sensibilidad de la inteligencia para que el pensamiento sea claro, directo, preciso a fin de tener la mente focalizada sin oscilaciones. El método de yoga nos une, nos integra cuerpo, mente inteligencia , ego y conciencia. La práctica yóguica tiende a vincular el cuerpo y el alma con el hilo de la conciencia aportando unidad a la diversidad . A través de la práctica de yogasana asumiendo una cierta postura con el cuerpo, teniendo en cuenta la forma física y una actitud mental discriminadora, permaneciendo en la postura para sentir el asana, colocando las partes en la posición correcta se va profundizando en el conocimiento, la concentración, la mente se silencia cesando las fluctuaciones logrando un estado de serenidad. Cuando el esfuerzo en la postura desaparece reina la tranquilidad , una quietud silenciosa, creando una pausa, un espacio, meditando en la postura. Cuando estamos preocupados por el futuro, por el pasado, estamos perdiendo la totalidad del presente del aquí y ahora , la práctica de asanas nos dá la oportunidad de observarnos en el único y preciso instante, en el presente .
El arte del yoga no solo pretende mantenernos sanos sino que el cuerpo sea ligero y refinado. Cuando el cuerpo está sano la mente está libre de los conflictos del cuerpo y desarrolla un intelecto claro, estable, superando los miedos y las preocupaciones, el intelecto se vuelve atento, activo, resurgiendo la creatividad y en ella la libertad, en la libertad hay precisión y en la precisión está Dios, la Verdad.
En el TaoTekin del Laotsè nos dice:
"Alcanza la suprema vacuidad y mantente en la quietud ante la agitación hormigueante de los seres no contemples más que tú regreso".
La brillante quietud vertiendose en cada uno de nosotros ,estar en ese instante del ahora. La única y brillante quietud manifestándose en el presente.
Como el cuerpo es el Santuario del Alma, debe mantenerse sano, limpio y puro. Es recomendable tener una práctica regular de yoga para poder obtener los beneficios que nos ofrece.
Al alcanzar la perfección de àsana (postura) hay que emprender el camino del Pranayama para regular la respiración, inspiración, expiración y retención. Prana (energía vital) Yama flujo continuo ininterrumpido de la respiración nos enseña como absorber, retener y utilizar la energía, para ello se requiere de la atención y percepción conciente de manera juiciosa y ordenada. A través del Pranayama, los sistemas respiratorios y circulatorio son conducidos a un estado de armonía. Al aquietar la respiración también se aquieta la mente aportando paz y equilibrio, un estado de sobriedad, claridad y desapego logrando una mente liviana y libre.
La técnica de relajación
Es necesaria pues es restaurativa, de recuperación, de recreación, el desgaste energético a de compensarse de algún modo. El arte yoguico de la relajación conocido como savàsana propone pasos muy precisos acerca de cómo relajarse y recuperarse. Savàsana savà significa "cadáver", muerto, ásana, postura. Así pues savàsana es la postura que emula a un muerto y de una muerte aparente, surge la vida, si bien parece una postura fácil, es una de las más difíciles de conquistar pero es la más refrescante y gratificante. En savàsana uno puede experimentar la entrega conciente del ego al olvidarse de uno mismo dejando caer el velo, el telón de la obra dejando ver, lo que somos, nos descubrimos a nosotros mismos.
"El Yoga es música para el cuerpo y el alma. El silencio es la mejor de las músicas, cuenta con su propio ritmo y melodías. La paz con silencio aporta armonía a la música del alma". B.K.S. Iyengar
Con un cuerpo sano y una mente pura resplandece la sabiduría en cada ser, volviéndonos cordiales y compasivos hacía sí mismo y la sociedad. Eso es lo que el arte del yoga enseña a la humanidad.
Graciela Quiroga Profesora Certificada de Yoga Iyengar
