La familia de Melany Juárez había perdido contacto con ella el sábado. Por eso fue que esta mañana sus hermanos llegaron con la policía a la pensión en la ciudad de Rosario donde la joven de 21 años alquilaba una habitación desde hacía varios meses. La escena que encontraron dejó a todos en shock: sangre por todas partes y el cuerpo de la víctima masacrado a puñaladas.
Los efectivos tuvieron que forzar la puerta del cuarto que ocupaba Melany porque estaba cerrada con llave. Adentro las luces estaban apagadas pero el sonido del televisor a todo volumen inundaba el ambiente. Ella estaba desnuda, tirada en el piso con la cabeza apoyada sobre la cama y a simple vista tenía entre 12 y 14 heridas de arma blanca.
En medio de la conmoción, los hermanos de Melany apuntaron sus sospechas contra el resto de los residentes del lugar. “Cómo puede ser que en habitaciones donde todo se escucha, nadie sabe nada”, cuestionaron en diálogo con El Tres.
Por su parte, Agustín, el otro hermano de la víctima, señaló a un hombre que vivió en la pensión poco tiempo: pagó un mes pero solo estuvo dos semanas, hasta el domingo pasado.
El caso es investigado por el fiscal de Homicidios Dolosos, Ademar Bianchini, quien ordenó una serie de medidas que apuntan a reconstruir los últimos días de la mujer. En principio pidió un relevamiento de las cámaras de seguridad de la zona. En tanto, trascendió que en la escena del crimen no pudieron encontrar el teléfono celular de la víctima.
Melany había trabajado hasta hace poco tiempo como empleada en un local de venta de artículos para celular y actualmente se dedicaba a la cadetería a través de una conocida aplicación. Además, era profesora de salsa y reggaeton.
Fuente: TN