Todo junto y todo mal. En una tarde para lamentar, olvidar y aprender como lección, Sportivo Peñarol se quedó afuera de la lucha por el segundo ascenso en el Torneo Federal A, al caer goleado en su estadio 5-2 por Defensores de Pronunciamiento. Apenas 10 minutos fueron el principio del fin para el Bohemio. Es que todo parecía encaminado para empezar a ganarlo porque Espejo ya había obligado al penal y todo Peñarol se aprestaba a gritar el primero y bien temprano. Pero el Pipi Salinas decidió sutileza ante Correa y el arquero de Defensores no la pensó. Penal atajado y golpe anímico para el Bohemio que en los 10 minutos siguientes vio como se desmoronaba la tremenda campaña que lo metió incluso en la Copa Argentina. Es que a los 16" Rodríguez aprovechó la contra visitante y puso el 1-0, otro golpe mortal. Pero había más. Trabó Espejo con el propio Rodríguez y la Joya de Peñarol quedó maltrecho. Afuera. Otro mazazo. Y como para completarla, Rodríguez eligió golazo para poner el 2-0 antes de esos 20 primeros minutos de partido que pusieron nocaut al Bohemio. Lo que quedó de primer tiempo fue para tratar de sacudirse en Peñarol y esperar el descanso para la reacción. Pero claro, la pesadilla no terminaba todavía y es que a los 17 segundos del esperado segundo tiempo que podía ser el del milagro, un error de Pave le permitió a Robles poner el 3-0 casi lapidario para los entrerrianos.
Peñarol marró dos penales, uno en cada tiempo, haciendo figura al arquero Correa.
Quedaba solamente el corazón de Peñarol como bandera para tratar de buscar ese milagro del empate y los penales. A los 19" Lucas Fernández acortó distancias con un golazo de tiro libre. Si se podía, era para ir a buscarlo y Peñarol decidió ir. Se desprotegió mal atrás y lo pagó con el penal de Yori al incontrolable Rossi que Giuffrey cambió por el 4-1. Peor imposible. Más demoledor, imposible. Pero para agregarle dolor a la eliminación, Gutierrez metió el quinto en una enorme jugada. La pesadilla estaba consumada pero tenía un capítulo mas porque le hicieron penal a Da Silva y Michel García lo pidió. Le dio fuerte, al palo derecho de Correa y el arquero de Pronunciamiento terminó su tarde espectacular sacando la pelota a mano cambiada. Nada, ni ese consuelo para un Peñarol aturdido que intentó algo más y con Argumoza descontó para terminar de despedirse de la temporada con una producción errática. Quedó poco tiempo más de partido para que Peñarol intentara lo que no había podido antes. Defensores, sólido y ganador, se limitó a esperar otro error sanjuanino para liquidar una clasificación que sorprendió a muchos por lo que el Bohemio venía jugando.
Se terminó la campaña en Peñarol de la manera más dolorosa e inesperada. Ese lapso de 10 minutos en que lo pusieron nocaut con penal errado, lesión de su estrella y goles visitantes fue demoledor para sus reservas anímicas. Se quedó sin nada ante un rival ordenado, práctico y simple. Se quedó sin nada con una imagen que no estuvo ni cerca de la que entregó en la fase clasificatoria. Fue una tarde de dolor en Chimbas para un Peñarol que jamas pudo salir de ese golpazo anímico. Desde lo futbolístico, no pudo entregar nada de lo que supo hacer. Así, en una despedida inesperada y ante su gente, el sueño de la ilusión por ascender se convirtió en la peor pesadilla. Le tocó perder feo y el golpe será grande.