La silueta de una nave hundida en el fondo del mar a casi 500 metros de profundidad, “compatible” con la silueta del submarino perdido en el Atlántico Sur hacen 18 días, volvió a encender ayer la llama de la esperanza de los familiares de los 44 tripulantes del navío. Pero, después de horas en vilo, la búsqueda sumó una nueva frustración: No era el submarino ARA San Juan.
La imagen que había detectado el jueves 30 de noviembre el buque argentino de investigación oceanográfica y pesquera “Víctor Angelescu”, y que había corroborado en varias pasadas, era de un pesquero hundido producto de un antiguo naufragio. Así lo informó el vocero de la Armada, Enrique Balbi,cerca de las 19 después que el minisubmarino ruso Panter Plus descendiera hasta los 477 metros y tomara fotografías del navío detectado y confirmara que no era el ARA San Juan. Por esas horas, parecía inminente una confirmación afirmativa y se especulaba con un próximo rescate.
Ahora, el Panter Plus se abocará a chequear otros tres “contactos” detectados en aguas del Atlántico Sur para determinar si alguno pudiera corresponderse con el submarino perdido.
El vocero de la Armada, en una segunda rueda de prensa por la tarde, precisó que los tres “contactos” están a 700, 800 y 900 metros de profundidad y serán inspeccionados por el ROV ruso Panter Plus, embarcado en el navío ARA “Islas Malvinas” y chequeados en la Base naval de Puerto Belgrano.
El Gobierno, en tanto, reiteró que seguirá “hasta el final” la búsqueda de la nave e irá a fondo “con todas las investigaciones que hagan falta para saber qué fue lo que pasó”, con el sumergible, expresó desde Washington, donde realiza una visita, el jefe de Gabinete, Marcos Peña.
Balbi leyó un nuevo parte en el que precisó: “El contacto detectado el 30 de noviembre con ecosonda multihaz por el buque “Víctor Angelescu” del Ministerio de Agroindustria, fue verificado visualmente mediante el ROV ruso Panter Plus embarcado en el aviso ARA “Islas Malvinas”, arrojando un resultado negativo por no corresponderse con el submarino”.
Las imágenes fueron inspeccionadas “entre las 9 y 13 hs del día de hoy, en posición 46º24.5″ Sur y 60º11.7″ Oeste a una profundidad de 477 metros, siendo de forma alargada, con arrumbamiento norte-sur, de aproximadamente 62 metros de longitud y 13 metros de altura”.
Estos datos alimentaron las esperanzas entre los familiares de los 44 ya que las medidas de la nave hundida eran compatibles con las del ARA San Juan que mide 65 metros de longitud y unos 15 de altura.
Sin embargo, según lo revelado por Balbi, para la Armada “desde un inicio, este dato no parecía coherente con la cinemática del submarino, ya que se encontraba a 27 km al sudoeste (SW) de su última posición informada”.
Por otra parte, Balbi confirmó que las operaciones continuarán hoy, con el análisis de los tres “contactos” que falta verificar, en la Base Naval Puerto Belgrano, con personal del Reino Unido y Rusia, “en función de las distancias, la profundidad y la clasificación de la información respectiva” y subrayó que “nada debe quedar en el azar”. Ratificó, además, que el área de rastrillaje en las aguas del Atlántico Sur “fue cubierta en un ciento por ciento” y agregó que las unidades que operan en la zona están realizando “un segundo barrido”.
Llega el Curv-21 a la zona de búsqueda
Tras desvanecerse esta posibilidad, la búsqueda continuaba al atardecer. La Armada espera para hoy domingo la llegada a la zona de operaciones del minisubmarino estadounidense Curv-21; y también la de otra nave de última tecnología rusa que se sumaría a los trabajos de búsqueda el martes.
Ambas máquinas son capaces de identificar elementos sumergidos a una profundidad de hasta 6.000 metros.
Además, el vocero Balbi ratificó que cesó el operativo de búsqueda y rescate el 30 de noviembre porque los datos propios, y los provenientes de otros países y agencias, civiles y militares, llegaron a la conclusión que “el ambiente extremo, el tiempo transcurrido y la falta de cualquier evidencia, impiden sostener un escenario compatible con la vida humana”.
El télex que daba cuenta del hallazgo
El 30 de noviembre, un télex remitido desde el buque Angelescu a la cúpula de la Armada informó haber detectado un “blanco sonar” que podría ser el ARA San Juan. En un principio, la marina soslayó la información entregada por Angelescu. El télex girado a la Armada y a la Prefectura decía textualmente: “BIP VICTOR ANGELESCU”: Siendo las 10:00hs del día 01 de Diciembre se completa el 100% del barrido con ecosonda multihaz de la cuadrícula de búsqueda “Angelescu 4”. Tal como fuera reportado oportunamente al centro SAR ARA, a las 07:32 hs del día 30 de Noviembre se detectó un blanco SONAR considerado de interés por sus características y emplazamiento. El blanco mencionado se detectó en posición 46º24.5″S/060º11.7″W y a una profundidad de 477 m. El blanco se detectó sobre un fondo plano y no se observaron otros blancos alrededor del mismo. Aparentemente, el blanco se ubica en la columna de agua en contacto con el fondo pero sin formar parte del mismo (no se lo considera parte de una restinga). El blanco es de forma alargada, con arrumbamiento N-S/S-N. Las dimensiones aproximadas fueron de 62 m de longitud y 13 m de altura sobre el fondo. Se realizaron numerosas pasadas de confirmación, tanto con diferentes configuraciones de ecosonda multihaz como con diferentes frecuencias de ecosonda monohaz. En todos los casos se verificó lo arriba descrito. Las imágenes
fueron enviadas al centro SAR ARA. Se recomendó identificación del blanco detectado con SONAR de Barrido Lateral”.