La posibilidad de afectar con un nuevo impuesto al vino en el marco de la reforma impositiva que está bajo análisis en el Gobierno nacional, cayó como un balde de agua fría en las autoridades provinciales y sector vitivinícola local.
El gobernador Sergio Uñac catalogó como “una locura” la posibilidad del nuevo gravamen. “Si quieren aniquilar la vitivinicultura, que nos avisen”, disparó esta mañana en diálogo con Estación Claridad.
“Me parece una locura. Nadie me lo comentó, parece que son proyectos que se hacen entre cuatro paredes alejados de las economías regionales. Me parece incorrecto, que no es el camino y que hay un desapego a la subsistencia de las economías regionales”, agregó.
Frente a esta posibilidad, entre los actores de la industria aseguraron a DIARIO DE CUYO que buscarán adelantarse a la decisión a través de la gestión política que puedan llevar adelante los legisladores y los gobiernos de las principales provincias englobadas en esta actividad, entre ellas San Juan, Mendoza, Salta, La Rioja, Córdoba y Catamarca.