Los jueces del Tribunal Federal, Daniel Doffo, Eliana Rattá y Alberto Carelli, dieron a conocer ayer los fundamentos de su fallo por el segundo juicio contra los cuatro condenados por la trata con fines de explotación sexual de una chica cuando tenía 14 años, entre fines de 2011 y comienzos de 2012. Y en su resolución impusieron una pena única a uno de los condenados, Federico Elías Fernández Santa Lucía, que en el primer juicio (parcialmente anulado) había recibido 4 años por tenencia y acopio ilegal de armas y munición de guerra y fue absuelto por el delito de trata. Al cabo del segundo juicio, que concluyó en diciembre pasado, le dieron 12 años de pena por trata con fines de explotación sexual agravada. Pero como nadie puede cumplir más de una pena, y sobre todo en una misma causa, el tribunal federal local le unificó ayer el castigo en 12 años y 6 meses de prisión, dijeron fuentes judiciales.
La niña había desaparecido el 7 de noviembre de 2011 y recién fue localizada cuando escapó de sus presunto cautiverio, el 15 de febrero de 2012. Su versión fue clave para que apresaran a sus hermanas Nancy González (expareja de Fernández Santa Lucía) y Yésica Cortese, y a Emanuel José Samuel Astudillo.
En el primer juicio que concluyó en 2015, González y Astudillo habían sido absueltos, pero ahora resultaron condenados a 5 (a la mujer la consideraron partícipe secundaria) y 10 años, respectivamente. Cortese había recibido una primera condena de 3 años por corromper sexualmente a su hermana, pero en diciembre recibió 10 años de pena.
Ahora, un tribunal provincial deberá unificarle a Fernández Santa Lucía el nuevo castigo con otros dos que recibió en la Justicia provincial: 1 año por amenazas contra dos nutricionistas y otra de 14 años por el abuso sexual de su hijastro (tenía 5 años) que se descubrió con la investigación por trata.