Quedan apenas cuatro días para que los municipios terminen de detallar ante Hacienda provincial en qué usaron los casi $250 millones (entre fondos locales y nacionales) que recibieron para asistir a las víctimas del terremoto de hace dos meses. Pero esa rendición de cuentas va muy lenta. Así se desprende tras la consulta de DIARIO DE CUYO entre los tres municipios que recibieron más plata (Pocito, Rivadavia y Sarmiento, que percibieron $29 millones cada uno).
Pocito tiene prevista esa rendición esta semana. "Los fondos que hemos recibido han sido superados ampliamente, las últimas lluvias fueron más dañinas que el propio terremoto porque con el ingreso del agua perdieron sus pertenencias, electrodomésticos, calzado, colchones, todo", explicó Armando Sánchez, intendente de Pocito. "Ya dispusimos $15 millones de las arcas municipales, más los $29 millones que nos dieron y vamos a reasignar una partida más por parte del municipio de $10 millones, por eso nos demoramos en la rendición", dijo el funcionario.
Mauricio Rodríguez, secretario de Obras y Servicios Públicos de Pocito, explicó que el municipio destinó fondos en la contratación de maquinarias como retroexcavadoras, cargadoras, motoniveladoras y minicargadoras, camiones de distinto porte y bateas, además de hidroelevadores y grúas pluma, para proceder a la demolición total de casas colapsadas y la extracción de adobes de las viviendas; unas 400 casas en distintas zonas de Pocito, el 70% concentradas en la zona de la Rinconada. "Esto fue necesario también para la instalación de los módulos, además de tala de árboles para resolver problemas del alumbrado", dijo Rodríguez. Agregó que además entregaron materiales, construyeron plateas para casas y repararon redes de alumbrado y de agua y cloaca.
Por el lado de Rivadavia, no precisaron los montos utilizados al momento y al igual que en Pocito, según Verónica Alfaro, secretaria de Gobierno municipal, la necesidades superaron ampliamente los montos de ayuda otorgados. "A la tercera compra que solicité por el tema de los damnificados me dijeron que los montos de Nación se habían agotado", dijo Alfaro, quien destacó que la inflación jugó en contra a la hora de planificar las ayudas. En este departamento, el 60% de los damnificados se concentraron entre nueve asentamientos como el Pellegrini, Evita, RIM 22 (sectores 1, 2 y 3) y Medalla Milagrosa entre otros. Las ayudas que se realizaron implicaron materiales para la refacción de casas y la conformación de "Brigadas de emergencia", una por asentamiento y compuestas por 100 personas, conformadas por gente con conocimientos en construcción y albañilería para ayudar a madres solteras y ancianos a realizar los arreglos en sus viviendas.
En Sarmiento, la rendición de cuentas se realizará en breve, según el intendente Mario Martín, quien puntualizó que lo que llevan gastado hasta el momento son $6 millones de pesos del total. "Nos vimos en la necesidad de declarar la emergencia habitacional en Sarmiento, que nos dio la posibilidad de disponer de $10 millones de fondos municipales con este fin, así que sumando los aportes de provincia y Nación son $39 millones en total en esta cuenta", dijo Martín.
Con 500 familias afectadas, dieron marcha a la construcción de módulos habitacionales definitivos. La proyección es construir 50, de los cuales 9 se entregan la semana próxima y ya hay en proceso 15 más. Son módulos sismorresistentes en block, de 40 metros cuadrados, con instalaciones eléctricas, dos habitaciones, cocina y baño, para una familia de hasta 6 personas. Los módulos se instalarán en Cochagual, Colonia Fiscal y Los Berros.
También se compraron materiales para reparaciones de grietas y techos en casas precarias, como palos, cemento y hierros. Se alquiló un quincho en el que están viviendo seis familias evacuadas, y se generó un programa de alquileres en donde el municipio costea este alquiler por seis meses para las familias que requieran esta asistencia. Hasta el momento hay 30 familias bajo este sistema.
Fe de erratas
En la nota publicada por este medio el domingo 14, vinculada a las ayudas otorgadas por el terremoto, en los dichos de Adolfo Vázquez, secretario de Servicios Públicos de la provincia, en donde dice "Llegan a razón de 20 módulos semanales, son de fácil montaje y estimamos que a fines de marzo o a más tardar principios de abril, ya todos estén montados", lo correcto en la frase es a "fines de abril", no a principios.