Señor director:
En la pasada fiesta de Navidad, el uso de pirotecnia se hizo sentir. Como es de público conocimiento, algunos municipios prohibieron la venta de estos elementos que son dañinos, tanto para la salud humana, como para los animales, en especial los domésticos. Yo vivo en Santa Lucía y doy fe de que muchos vecinos tuvieron una cena navideña alterada. Petardos que parecían verdaderas explosiones de bombas, cohetes de distintas estridencias. En fin, esas explosiones alteraban momentos en los que la familia se reunió para disfrutar de la celebración del Niño Jesús.
Como conclusión de esta reflexión, se puede decir que la última palabra la tiene la Legislatura provincial por medio de sus diputados. Se hace necesario crear una ley que prohiba en todo el territorio provincial la venta y uso de pirotecnia. Esto es por el bien de todos los sanjuaninos.
