El primer medidor de luz que estalló y fue un ‘festival’ de explosiones fue alrededor de las 23 de este viernes. El episodio generó cortes y bajones de luz en el populoso barrio Aramburu. Casi una hora más tarde, otra pilastra de luz ardió en llamas y ahí se multiplicaron las caídas del servicio de luz.
Ambos episodios generaron primero, pánico entre los vecinos y, segundo, malestar por quedarse sin electricidad en la calurosa noche sanjuanina. Cuando llegaron las cuadrillas de Energía San Juan los vecinos buscaron una explicación de por qué los medidores domiciliarios habían estallado.
"No es posible que se paguen boletas de luz a valores siderales y tengamos un pésimo servicio", se lamentó una vecina en contacto con este diario. "Estamos sin luz desde las 23, es una vergüenza, nos cansamos de reclamar", agregó Lorena.
Este sábado bien temprano personal de ESJ realizó tareas complementarias a las ejecutadas en la madrugada para restablecer el servicio a todo el Aramburu. Desde la empresa distribuidora informaron a DIARIO DE CUYO que se trató de 2 medidores quemados y una acometida subterránea que entró en cortocircuito. "El problema está resuelto y los usuarios con servicio", dijeron.