Chile sigue en alerta en medio de actos violentos, con graves enfrentamientos con el Ejército y las fuerzas de seguridad, saqueos, incendios y robos. La situación, desatada por una ola de protestas luego del aumento de la tarifa eléctrica y de transporte, ya se cobró 10 vidas.
En ese contexto, la militarización del país ordenada por el presidente Sebastián Piñera, aumentó en las últimas horas. Y se aplicó el toque de queda en la capital chilena, lo que prohíbe la circulación de personas entre las 19 y las 6 de la mañana.