La violó al menos dos veces, la manoseó otras tantas y la corrompió. Todos estos vejámenes fueron contra su propia hija, que al momento de los hechos tenía 14 años. Por estos delitos, acordó cumplir una pena de prisión de 10 años que deberá ser aceptada por el juez.
La causa se llevó adelante en la Sala II de la Cámara Penal, a cargo del juez Ernesto Kerman, donde actuó como fiscal Marcela Torres y como defensor del acusado lo hizo el abogado Henry Peralta.
Los hechos denunciados ocurrieron en una casa de la Villa Cabecera de Calingasta. Este sujeto de 42 años (se suprime la identidad para reservar la de la menor), de oficio obrero, terminó siendo denunciado en febrero del 2019 luego que se descubrieran sus aberrantes maniobras.
Según la denuncia, el hombre la abusaba en la misma casa que compartían y la amenazaba para que no hable, pero en una de las veces que abordó a su hija con intenciones sexuales fue vista por un hermano mayor, quien alertó a su madre. También fue clave una médica calingastina que observó en la menor signos claros de violación.