El seleccionado de rugby de Australia, del que se despidió el argentino Mario Ledesma como asistente del entrenador Michael Cheika, jugó un gran partido y venció ayer a Nueva Zelanda, bicampeón mundial vigente, por 23 a 18, en el tercer cotejo de la Bledisloe Cup, trofeo que disputan ambos equipo anualmente y que en esta ocasión quedó en poder de los All Blacks.